Tavira
La historia de Tavira se pierde en el tiempo. Ciudad de múltiples tesoros, llena de rincones con encanto y atravesada por el río Gilão, permite que el viajero recorra su historia con tranquilidad. Sus veintiuna iglesias, de varios estilos arquitectónicos (gótico, manuelino, renacentista, estilo chão y barroco) son como una lección de Historia del Arte. Edificios civiles y militares notables se pueden observar en las dos orillas del río, unidas por un puente medieval de travesía obligatoria. Es imprescindible visitar el castillo musulmán y cristiano, con vistas al conjunto edificado, la sierra, el mar y la Ria Formosa. Una vez en la antigua alcazaba, se puede visitar también la cercana iglesia de Santa Maria do Castelo, construida sobre la antigua mezquita. Parte de la historia de la ciudad se encuentra materializada en sus museos y núcleos museológicos, que presentan una programación dinámica y se encuentran muy cerca del castillo. El paisaje natural del entorno de Tavira, integrado en el Parque Natural da Ria Formosa, tiene varios reconocimientos internacionales. Este sistema lagunar está delimitado por un conjunto de islas con playas paradisíacas como la de Barril, Terra Estreita, Ilha de Tavira o Cabanas de Tavira, que se pueden visitar haciendo una breve travesía en barco y aprovechando para observar las innumerables especies animales y vegetales que existen. Tavira es la comunidad representativa de Portugal de la Dieta Mediterránea, clasificada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2013.